Agilidad Estratégica

By Jose Media

Una necesaria capacidad organizacional para superar la crisis

La incertidumbre en un entorno cambiante, intrépido y dispuesto a transformarse de un momento a otro es una condición de los mercados que se venía analizando y advirtiendo, debido a la aceleración en los cambios tecnológicos, económicos y sociales, y al nacimiento de modelos de negocio cada vez más disruptivos dispuestos a competir dentro de mercados que parecían solidos y estables,  sin embargo la actual crisis a agravado este diagnóstico, dándole un nuevo significado y perspectiva a la incertidumbre. Esta nueva realidad hace necesario que los líderes empresariales pongan foco al movimiento y logren adaptarse de la mejor manera no solo para sostener el negocio sino para colocarse en una posición privilegiada en la medida en que pase la tormenta.

En términos de capacidades organizacionales, la agilidad estratégica invita a estar atentos a estos movimientos, sus consecuencias en nuestro mercado, a diagnosticar de forma rápida y precisa la afectación, nuestra operación y competitividad, para ajustarnos rápidamente interpretando de la mejor forma los desafíos que nos presenta el entorno. Pero no solo se trata de responder rápidamente a los desafíos con flexibilidad y adaptación, hablamos casi de aprender cada vez más rápido, acelerando la mejora del desempeño, creando mayor valor y capitalizando nuevas oportunidades, nada más relevante que esta habilidad para tratar la turbulencia que experimentamos actualmente.

En medio de la actual crisis, muchas organizaciones están experimentando una agilidad y adaptabilidad que nunca pensarían que podían lograr, dejando de lado los planes detallados, los presupuestos, análisis y aprobaciones exhaustivas, pasando de acciones que tardarían meses e incluso años a unas pocas semanas, acelerando la generación e desarrollo de ideas e implementando principios de agilidad. Ante esta sensación de fluidez, ¿cómo pueden las organizaciones mantener y potencializar esta agilidad organizativa, incluso en el mundo post pandemia?

 

Te contaremos en 3 secciones nuestra recomendación

  1. Aumenta el esfuerzo y la velocidad de la Innovación
  2. Equipos Agiles y en Red
  3. Liderazgo y Agilidad, el rol de la alta dirección

Colombia el ADN emprendedor e intra emprendedor es muy fuerte, el problema es que nos saltamos los pasos intermedios de la innovación pasando directamente de una idea

Aumenta el esfuerzo y la velocidad de la Innovación

La innovación es la estrategia por excelencia para lograr adaptabilidad y agilidad, ya que se alimenta precisamente de los cambios del entorno, del empuje tecnológico o de las nuevas necesidades del mercado, elementos que usa como semilla para generar y aprovechar nuevas oportunidades para la organización.

Sin embargo, hay una importante aclaración para el contexto Colombiano, puesto que una idea generalizada es que en el país no se hace innovación, diría que no es del todo cierto, en Colombia el ADN emprendedor e intra emprendedor es muy fuerte, el problema es que nos saltamos los pasos intermedios de la innovación pasando directamente de una idea, que generalmente sale del fundador o gerente, a directamente su lanzamiento al mercado, como diría el adagio popular “a ojo cerrado” literalmente, resultado para muchas de estas iniciativas en fracasos, que para el caso de nuevos emprendimientos llega a tasas de hasta el 90%, y en el escenario empresarial genera perdidas muchas veces irremediables, terminado por afianzar el statu quo de la empresa y la aversión a buscar nuevas ideas u oportunidades.

Por esto el modelo adecuado de innovación NO termina en la generación de ideas, se trata también de confrontarlas previamente a pruebas, aprendizajes y adaptaciones que permitan asegurar una mayor probabilidad y potencial de éxito en el mercado. Suena lejos de un modelo ágil, sin embargo, la clave aquí no es lanzarse al vacío, es más bien correr a un ritmo en el que al final puedas llegar a la meta, en otras palabras, hacerlo bien no significa hacerlo lento.

La innovación con esos pasos intermedios es más el mostrado en la figura, teniendo en cuenta que en la práctica no es lineal, mas bien esta mediado por iteraciones y pivotes, donde podemos saltar de un lado a otro, y donde el producto no es siempre un tangible o un servicio, pude ser un nuevo modelo de negocio, una estructura organizacional, una mejora sustancial a los procesos, una estrategia de branding o un canal más eficiente de comercialización.

Ahora bien, el componente de agilidad que demanda el contexto actual se puede lograr mediante la implementación de un sistema ágil que utilizan métodos para acelerar la velocidad de la innovación, acortando el tiempo transcurrido entre la identificación de un problema u oportunidad y la puesta en marcha de la solución innovadora. Entre estos métodos se encuentra el de optimizar los tiempos de factores operativos de los proyectos, como calendarios de planificación estratégica, procesos de aprobación, ciclos de presupuesto y financiación, entre otros tantos, acciones que pueden impulsar hasta por cinco veces la agilidad del proceso innovador. Sumado a esto se puede segmentar los grandes proyectos en fracciones más pequeñas, con ciclos de retroalimentación más rápidos (ciclos como el de la figura), que a su vez permiten responder a cambios o nuevas necesidades dentro del mismo proceso, estos ciclos comúnmente llamados sprints pueden generar innovaciones rápidas que rompen el paradigma de las robustas apuestas de transformación a varios años, tiempo que hoy en día es un lujo que las organizaciones no tienen.

Comparte nuestro contenido

Hablemos

Abrir chat
Chatear con Alguien
Soluciones de Outsourcing de SST